¿Y cómo se han dado cuenta de esta situación? El hallazgo se ha producido gracias a la empresa de seguridad ESET. Según explican en un comunicado en su página web, el grupo de hackers ruso elaboró una extensión que se instala en Firefox cuyo supuesto propósito es dar al usuario seguridad ante invasiones informáticas. Pero, en realidad, el gadget infecta el PC de la víctima y toma el control de algunas de sus funcionalidades. El troyano diseñado por Turla es capaz de encontrar la ubicación de los servidores que serán utilizados para descargar los datos robados usando los comentarios en perfiles de redes sociales.
Según han observado los expertos en seguridad de ESET, Firefox está trabajando con el fin de que la extensión ya no sea válida en su navegador.